ADÓNDE VAN A DORMIR
LAS PALOMAS
En la paz de los ocasos nos preguntamos adónde van a dormir las palomas. Habitantes de nuestra ciudad que conviven con nosotros y el paisaje urbano está poblado de ellas, que han perdido el miedo para caminar entre los cordobeses. No se inmutan, andan volando por el cielo y deambulan en la tierra buscando su alimento. Se aparean, anidan, tratando de encontrar cobijo en los campanarios de las Iglesias, cornizas, ventanales, pórticos, capiteles, entre tantos lugares recónditos de la urbe. Casi nadie repara en el datalle de la presencia diaria con las colonbinas. Algunos las alimentan ocasionalmente en las plazas y también, muchos se fastidian con sus escrementos. Yo, en mi andar por el centro capturo parte de su vida y veo dónde descansan después que baja el sol; allí, en una pequeña porción de mampostería se acurrucan, mientras nosotros aún existimos.
Adónde van a dormir las palomas
Fotografías Isaac Silbermanas
Levantando vuelo desde la Catedral
Fotografía: Isaac Silbermanas
Simbólica imagen del monumento al General San Martín,
en la plaza principal de la ciudad de Córdoba, acompaña
el vuelo de nuestra paloma que es mi tema actual
Fotografía: Isaac Silbermanas
La noche se avecina sobre la Catedral de Córdoba y en
algún recoveco de sus tejados duermen nuestras colombinas
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Vuelo libre
Fotografía: Isaac Silbermanas
Atardecer sobre la Catedral de Córdoba
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Vuelo hacia el nido a la luz de la luna
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Baño matinal en la fuente de la Plaza San Martín
Fotografía: Isaac Silbermanas
Retornando al tejado del Obispo Mercadillo. Córdoba
Fotografía: Isaac Silbermanas
Importante balcón colonial del Obispo Mercadillo y nuestras palomas
Fotografía: Isaac Silbermanas
Paloma y veleta
Fotografía: Isaac Silbermanas
Perfil de paloma sobre el balcón Fotografía: Isaac Silbermanas
Importante balcón colonial del Obispo Mercadillo y las palomas
Fotografía: Isaac Silbermanas
Vuelo sobre el cielo cordobés y la Iglesia de las Teresas. Córdoba. Detalle: en las cornisas algunas palomas duermen
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Siempre su presencia en los lugares sacros de Córdoba
Fotografía: Isaac Silbermanas
En la penumbra del atardecer las palomas duermen en las cornisas
de las Teresas, con el fondo de la Catedral cordobesa
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
La fuente de la plaza Colón con el fondo de la Iglesia María Auxiliadora
Fotografía: Isaac Silbermanas
Antiguos nidos sobre calle San Jerónimo al 130
Fotografía: Isaac Silbermanas
Atardecer en los nidos sobre calle San Jerónimo al 130
Fotografía: Isaac Silbermanas
Farola de la peatonal con la silueta de una paloma. De fondo, la Iglesia de la Merced. Córdoba Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
La dueña de los balcones sobre calle Rosario de Santa Fe al 200
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Lugar privilegiado de observación en la peatonal Deán Funes,
con la ex Legislatura de fondo al atardecer
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
La puesta de sol sobre el ex edificio de la Legislatura y el vuelo
en lo alto de una colombina rumbo al nido Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Balcones del Monserrat Córdoba; en ellos se observan las palomas
ocupando su sitio nocturno, aunque la iluminación no las afecte Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Peatonal de la calle Caseros desde la Av. Velez Sársfield hacia la calle Duarte Quiróz. Se muestra en la imagen
la Iglesia de la Compañía de Jesús
Fotografía: Isaac Silbermanas 2020
Perfil nocturno de la Iglesia de la Compañía de Jesús con
las siluetas de las palomas sobre la cornisa del Museo San Alberto
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
las siluetas de las palomas sobre la cornisa del Museo San Alberto
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
En el misterio de la noche, la entrada al Museo San Alberto
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
La noche se adueña de la calle Caseros esquina Duarte Quiróz. Córdoba
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Farolas sobre calle Caseros al 88, que enmarcan la noche cordobesa
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Casona sobre peatonal Caseros al 80. que engalana la zona histórica
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Instalación sonora sobre la peatonal Caseros, a la entrada
de la Facultad de Derecho de Córdoba
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Frontis de la entrada lateral de la Iglesia de la Compañía de Jesús
sobre peatonal Caseros; territorio de nuestras aladas colombinas
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Portal Jesuítico de la Iglesia de la Compañía de Jesús
Fotografía: Isaac Silbermanas
La noche se apoderó de la Iglesia de la Compañía de Jesús y ya
se instalaron en sus rejas las palomas para dormir
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
La noche se apoderó de la Iglesia de la Compañía de Jesús y ya
se instalaron en sus rejas las palomas para dormir. " Detalle"
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Aunque estén iluminadas las aberturas, lo mismo pernoctan allí.
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Vista lateral hacia el oeste de la Iglesia de la Compañía de Jesús
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Vista nocturna de la Iglesia de la Compañía de Jesús con sus palomas
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Silueta de una paloma dormida
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Edificio del banco de Córdoba sobre calle Bs. As., ex hotel Palace.
Muestro esta fotografía para que se vean los pinchos que colocan para
que las palomas no se instalen sobre las barandas de los balcones
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Edificio del Banco de Córdoba sobre calle Bs. As., ex hotel Palace.
Vista de la parte trasera con su nueva y vidreada construcción.
Fotografía: Isaac Silbermanas 2021
Un vistazo a vuelo de paloma nos da la dimensión de una ciudad acompañada por estos ejemplares alados, presente desde tiempos inmemoriales al cobijo de la geografía en nuestra Docta. Testigos de tiempos e historias, sobrevivientes a la piqueta y el asfalto; al verlas la ciudad tiene vida, compañia, colorido, señorío y por qué no algo del alma del Creador.
Queda prohibida la reproducción total o parcial de las fotografías, ya que las mismas están protegidas por el derecho de autor. Gracias.
Isaac Silbermanas
